Ponerle nombre a un proyecto, puede resultar complicado, pero en este
caso, la concreción del mismo resultó casi instantánea. Coincidimos en que
el número 7 debía formar parte y que también necesitábamos
calderos, porque pensamos que la página va a borbotear con
experiencias, inquietudes y expectativas. Colocar el nombre… resultó un
proceso casi mágico… entonces fueron “7 Calderos Mágicos”.
Ahora veremos en detalle el porqué de cada cosa.
El siete es un número misterioso y mágico. Muchos misterios y mitos se
tejen a su alrededor. Muchos aspectos de la vida del hombre son regidos
por él:
Son siete días los que tiene la semana, los mismos que ocupó dios para
formar la tierra. Son siete los mares del planeta. Dante, en su obra, “La
divina Comedia” describe siete infiernos. Los metafísicos hablan de siete
niveles de conciencia, Blanca Nieves se acompaña por siete enanitos, el
arco iris tiene siete colores, son siete las notas musicales, las botas de
siete leguas, siete vidas tiene un gato y la serpiente de siete cabezas,
entre otras muchas cosas más.
Los calderos son vasijas grandes y redondas que representan un microcosmos
creador y fertilizador. Están asociados con lo femenino (y este caldero
fue ideado por mujeres) Cuando hablamos de calderos mágicos no debemos
caer en el error de visualizar una olla donde cabe todo, por el contrario,
el caldero como objeto sagrado debe ser confeccionado para un fin
específico, y nuestro caldero lo tiene.
Muchos escritores emplean un caldero en sus obras, y entre las más famosas
podemos mencionar la escena de Macbeth, de Shakespeare, donde preparan una
poción mientras McBeth decide su futuro de traidor o el
de
Medea, en cuyo interior se hirvió a Pelios para rejuvenecerle.
Nuestro caldero no se relaciona con traiciones o rejuvenecimientos…
Nuestros calderos se inspiran en el mito de
Kerridwen.
Educar en el Siglo XXI, es educar en la incertidumbre… por eso, hoy más
que nunca no existen pócimas milagrosas que nos garanticen el éxito.
Los niños y jóvenes con los que elegimos trabajar ya no son los mismos, y
nosotros tampoco. Los conceptos de Conocimiento y Saber también se han
modificado. El flujo de la información recorre nuevos circuitos. Hoy más
que nunca se ha fortalecido la relación entre Conocimiento y Poder.
Está en nuestras manos, brindar las herramientas que permitan a esos niños
y jóvenes insertarse en esta “aldea global” y cómo no existen recetas, el
desafío se agiganta. Nuestra intención al generar este espacio, es
compartir experiencias, buscar soluciones en compañía al constante desafío
que nos presenta el día a día, es abrirnos a la diversidad para el
enriquecimiento mutuo.
Mirta,
Viviana
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